lunes, 15 de abril de 2013

Añoranzas.


Alguna vez me han aconsejado no añorar tiempos pasados. Posiblemente un buen consejo, que yo no he aceptado.

No es posible dejar de añorar a los seres amados que ya no están físicamente a nuestro lado. No, no es posible.

Hay otras pequeñas añoranzas que también están ahí:

Añoro las noches sin luces.

Añoro los cielos estrellados.

Añoro los sonidos de mi aldea, que quizás no vuelvan nunca. Esa voz que al atardecer llamaba “Ai Manoooeeeeeellllllllllllllll…”. Llamada que el eco repetía, y así el Sr. Manuel bajaría las vacas del monte antes que terminara el día. Algunas veces la gente de la aldea tenía que subir con los "fachiqueiros" a buscarlo en la noche cerrada. Era un ser entrañable - había vivido más de cuarenta años en algún punto del Amazonas - y jamás tenía prisa. ¡¡Era un hombre feliz!!

Como echo de menos oír el golpeteo de un hierro en un legón intentando al final del día alejar a la zorra, acompañado de una voz que decía, medio cantando: “¡Jurria... Jurria, Jurria!” Y así largos minutos…

Sí, hoy recuerdo esos tiempos que vieron el final de una cultura campesina que, a la par de la dureza de algunos trabajos, tenía sabiduría, amor a la tierra y alegría para cantar trabajando. Serían voces “esganizadas” - decían algunos - simples e indolentes. Quizás lo fuesen. Alegraban el alma.

Al fin la primavera, con un  mes de retraso.

 Hoy asomó tímidamente el sol y hemos podido poner en tierra arbustos que llevaban meses en tiestos esperando que la lluvia nos diera un respiro. Sólo soy capaz de recordar uno o dos inviernos de tanta agua.

Trabajos de primavera.

Camelio en flor.

Con buen ánimo y mala voz yo también canturreé mi largo repertorio. 

Que lo que queda de primavera nos sea propicia.

9 comentarios:

  1. Maruxa, yo también tengo muchos recuerdos parecidos que creo que ya nunca volverán. Besitos.

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola, Maruxa!, qué bonitas esas fotos; la del camelio es una preciosidad y los tulipanes parecen dibujados. Me gusta mucho también la que ambienta los trabajos de primavera.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Que tenga Ud también una buena primavera.

    ResponderEliminar
  4. Hoy si llegó lá primavera, os envio mi afecto.

    ResponderEliminar
  5. preciosa primavera... aquí entramos al dorado otoño!
    cada estación con sus recuerdos, sus memorias y sus enseñanzas
    saludos!

    ResponderEliminar
  6. Hallo Maruxa,
    deine Kamelie ist wunderschön. Schade, dass diese schöne Pflanze nicht bei uns wächst.
    Gruß, Anette

    ResponderEliminar
  7. Por fin parece que la primavera va llegando tímidamente (la temperatura todavía es suave) para quedarse. Muy bellas la fotos, Maruxa, pero todavía más tus palabras.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  8. Para Anette y Raquel un abrazo y mis mejores deseos.

    ResponderEliminar
  9. Los sonidos de mi niñez me acompañan siempre, cierro los ojos
    y escucho el orbayu cayendo suavemte sobre los arboles que rodeaban la casa de mi abuela. Tu blog, es un reducto de magia.

    un abrazo

    ResponderEliminar